pixelfacebookissok

¿Qué es la Teoría Sistémica? O cómo puedes influir en los demás

enfoque-sistemico-teoria-sistemica
Estamos interconectados. Pero, espera: no estamos hablando de las posibilidades que nos brinda la tecnología para conectarnos mediante tantísimos canales. Más bien, hablamos de la interconexión que existe entre todos y todas. Este es el punto de vista de la Teorías Sistémica o enfoque sistémico. ¿Qué es? ¿En qué consiste? Te lo explicamos.

Qué es la teoría sistémica: la interconexión del individuo

El Modelo ISSOK señala que es clave que seamos conscientes del papel que cada individuo juega en los sistemas de los que forma parte. De esta manera, el individuo es un “subsistema” que se relaciona con las partes de uno o varios sistemas. Esta es la interconexión de la que hablamos y se traduce en interinfluencia, interrelación y hasta en inter afectación.

¿Cómo funciona? Te mostramos un ejemplo: un individuo, a través de sus creencias, comportamiento y acciones se interrelaciona con los sistemas a los que pertenece.  Estos sistemas pueden ser la pareja,  la familia, las amistades, la comunidad, el equipo de trabajo, etc. Si analizamos sus acciones en detalle, podríamos llegar a observar el impacto que puede tener en el mundo y en la vida misma.

Tres términos clave para el enfoque sistémico: entropía, homeostasis y feedback

Para entender qué es el enfoque sistémico, hay tres términos que se utilizan y que nos gustaría resaltar: la entropía, la homeostasis y el feedback. Gracias a ellos, podemos comprender de manera más profunda lo importante que es.

La entropía es lo que se conoce como el “desorden” que puede surgir dentro de un sistema o subsistema debido a cambios en las partes del mismo o en otros sistemas con los que se relaciona. Por ejemplo, si un sistema se desestabiliza: estrés laboral, puede afectar a otro sistema, problemas de pareja.

El dinamismo que producen los cambios lleva muchas veces a que el sistema entre en conflicto o dicho de otra forma, se produzcan conflictos dentro de un mismo sistema. Cuando tiene lugar esta situación, el sistema busca su equilibrio u homeostasis para volver a adaptarse y seguir funcionando. Volviendo al ejemplo anterior, el apoyo y comprensión de la pareja puede influir positivamente en estabilizar el estrés provocado en el trabajo.

Por otra parte, sin la aportación del feedback es imposible que los sistemas funcionen: gracias a él, se establecen relaciones circulares en las que el propio feedback provee de respuestas y reacciones. Así, se intercambia un “diálogo” constante entre las partes de ese sistema.

A partir de aquí, surgen varias incógnitas: ¿Con qué calidad de feedback alimentamos a nuestros sistemas? ¿En qué medida aportamos para su equilibrio? O, dicho en otras palabras, ¿hasta dónde podemos influir o afectar a los demás?

Orden y desorden, equilibrio y desequilibrio: la visión sistémica sobre la vida que fomenta el Modelo ISSOK te invita a pensar en las posibilidades que tenemos de influir como individuos y como grupos a través de los diferentes niveles de responsabilidad que plantea el Modelo.

En primer lugar, es básico pensar en cómo podemos construir individuos (subsistemas) para que desarrollen habilidades que repercutan positivamente en ellos mismos. Solo de esta manera lograrán influir a los demás.

La “guinda de la tarta” es conseguir desarrollar las habilidades sociales y empáticas para que cada persona que experimenta el Modelo tenga la capacidad de ver, pensar y hacer por los demás. De esta forma, podrá aumentar su conciencia y descubrir el potencial transformador que tiene en su contexto, su entorno y en cada sistema a los que pertenece, o lo que es lo mismo: impactar, influenciar e incidir  “issokianamente” sobre las personas con las que se relaciona.

¿Habías oído hablar alguna vez de la teoría sistémica? ¿Qué te parece?

¿Te gustaría recibir artículos como este en tu correo?

He leído y acepto la Política de privacidad.

Relacionadas: